Leo mucho en las redes el afán por " enseñar" a los cubanos.
Las enseñanzas pasan por todo tipo de materia: culturales, políticas, económicas, historia, y así un sin fin de asignaturas pendientes que se creen necesitan los cubanos.
Pero a ver, ¿quién te has creído que eres para enseñar al cubano?
Desde ya les digo que el cubano nace sabiendo. No se hagan ustedes los "sabihondos" porque si eres cubano, y no sabes que el cubano nace sabiendo, el problema lo tienes tú.
A un cubano no hay quien le haga cuentos de partidos...¿sabes por qué? porque ven y perciben a todos los partidistas montados en su nube ideológica sin tocar tierra nunca, empezando por el de casa y terminado por los tropecientos del exilio. Ninguno le ha funcionado nunca, si acaso le valió alguno fue el Demócrata americano por aquello de pies mojados pies secos, y ya ni ese.
Los cuentos de la democracia tampoco se la creen, porque por más votos que han marcado, los resultados siempre son lo mismos, y porque saben que votar no es elegir, y que los partidos son máquinas de crear mediocres. Están viviendo en un mundo polarizado gobernado por élites muy demócratas ellas, pero todas se dan la mano y lo que haga falta... para relacionase con los de la Plaza de la Revolución.
El cubano vive el " aquí y ahora" con tal intensidad, que ya quisieran los monjes tibetanos...así que dejen la muela bizca para su casa y familia, y se han de hacer algo por lo cubanos que sea calladito, por aquello de que no sepa tu mano derecha, lo que hace la izquierda.
21 de julio de 2019
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